Bésame con todas tus fuerzas, en cada momento y en cualquier lugar, no tengas miedo de hacerlo, que miren los que quieran mirar. Y es que no hay nada más bonito que un beso de verdad entre dos personas entre las que existe esa química que las hace tan especiales.
Bésame y arranca todos mis miedos, déjame libre, que esto no se convierta en una obsesión y en una posesión. Porque el amor no entiende de ataduras, el amor es libre y no hay mejor sensación que dejar a una persona el espacio necesario y darle esas alas para que eche el vuelo lejos de ti y que aún con esas decida quedarse junto a ti. Yo no quiero que nada de esto nos ate. Tan solo bésame como tú sabes, embriagame un poco más con tu perfume antes de marcharte.
Pero no te vayas, quédate conmigo un poco más. No pongas excusas, permanece junto a mi como dijiste que harías. Ya sé que las promesas no son tu fuerte, pero no quiero que me prometas nada, sé que no lo cumplirás, a la mínima te marcharás como ya has hecho otras veces, pero antes de eso dame un beso de esos que cortan la respiración, de esos que revolucionan todas esas mariposas que hay en mi interior.
Bésame si quieres , hazlo si puedes. Que tus miedos no sean un obstáculo, que no te paren, que tus ganas ganen. Deja de ser tan cobarde y comienza a escuchar y hacer caso a esos impulsos que tanto reprimes, no temas si todo sale mal o al menos como tú no querías que saliera. Comienza a sentir más y deja de lado esa cobardía, porque como ya te dije a cobarde no te gana nadie.
Bésame y haz que el tiempo pare, que el instante sea únicamente nuestro y de nadie más. Hazme volver a creer en esos cuentos de hadas, en esos para siempre que siempre acaban, que no existen.
Cuando termines vete, no tienes nada más que hacer, el sueño ya ha terminado. Ya puedes irte, nada te retiene aquí. Porque lo que mejor se te da es huir y marcharte en el momento menos indicado, pero ya nos conocemos, no necesito tus excusas.
Vete.
Pero antes, bésame si quieres.
Hazlo si puedes.
Bésame y arranca todos mis miedos, déjame libre, que esto no se convierta en una obsesión y en una posesión. Porque el amor no entiende de ataduras, el amor es libre y no hay mejor sensación que dejar a una persona el espacio necesario y darle esas alas para que eche el vuelo lejos de ti y que aún con esas decida quedarse junto a ti. Yo no quiero que nada de esto nos ate. Tan solo bésame como tú sabes, embriagame un poco más con tu perfume antes de marcharte.
Pero no te vayas, quédate conmigo un poco más. No pongas excusas, permanece junto a mi como dijiste que harías. Ya sé que las promesas no son tu fuerte, pero no quiero que me prometas nada, sé que no lo cumplirás, a la mínima te marcharás como ya has hecho otras veces, pero antes de eso dame un beso de esos que cortan la respiración, de esos que revolucionan todas esas mariposas que hay en mi interior.
Bésame si quieres , hazlo si puedes. Que tus miedos no sean un obstáculo, que no te paren, que tus ganas ganen. Deja de ser tan cobarde y comienza a escuchar y hacer caso a esos impulsos que tanto reprimes, no temas si todo sale mal o al menos como tú no querías que saliera. Comienza a sentir más y deja de lado esa cobardía, porque como ya te dije a cobarde no te gana nadie.
Bésame y haz que el tiempo pare, que el instante sea únicamente nuestro y de nadie más. Hazme volver a creer en esos cuentos de hadas, en esos para siempre que siempre acaban, que no existen.
Cuando termines vete, no tienes nada más que hacer, el sueño ya ha terminado. Ya puedes irte, nada te retiene aquí. Porque lo que mejor se te da es huir y marcharte en el momento menos indicado, pero ya nos conocemos, no necesito tus excusas.
Vete.
Pero antes, bésame si quieres.
Hazlo si puedes.
Comentarios
Publicar un comentario