Son muchas las veces en las que la curiosidad puede con nosotros y queremos saber y averiguar algo que después nos pasará factura , es decir, que nos hacen daño.
Pero la gran pregunta es: ¿realmente queremos saber eso? Creo que son muchas las veces que no queremos saber ese secreto que nos ocultan, pero pensar que alguien sabe algo que tu no, hace que esa curiosidad tuya aparezca y quieras saber todos y cada uno de esos secretos que tú no sabes, secretos que tu mente imagina a cada momento, secretos que tal vez no tengan nada que ver con los que tu mente crea.
Esos secretos pueden hacerte daño, aunque hay veces que esos secretos no son malos, si no simples sorpresas o puede que no sean terriblemente malos o crueles, si no que esa persona no quiere contarlos por simple miedo o vergüenza por tu posible reacción.
Una cosa queda clara, la curiosidad muchas veces nos pica y algunas de esas veces también nos mata.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZu2YKfpj8sEw2cyRbs3LbiK7fhURVjVc57fd01mNUOmi_oVs1IbNLEAD1oiBzWjFdkHRAVTabEeGW5hf_scRYi9nbD-cqDcK89_PIPh33MRA2y_iAIa2K3oElkSKotS8croTzm69BjFJ1/s200/gato.jpg)
Esos secretos pueden hacerte daño, aunque hay veces que esos secretos no son malos, si no simples sorpresas o puede que no sean terriblemente malos o crueles, si no que esa persona no quiere contarlos por simple miedo o vergüenza por tu posible reacción.
Una cosa queda clara, la curiosidad muchas veces nos pica y algunas de esas veces también nos mata.
Comentarios
Publicar un comentario